En las primeras civilizaciones humanas se empleaban sustancias naturales para realzar la belleza, cumplir con rituales religiosos y establecer estatus social.
Desde anillos de compromiso que marcan el inicio de una vida juntos, hasta broches que adornan y embellecen, cada pieza de joyería tiene su propia historia.
Aunque la sociedad puede tener estándares específicos de lo que se considera "lindo" o "perfecto", es esencial reconocer que la belleza es subjetiva y diversa.
Desde ingredientes naturales hasta productos de maquillaje de última generación, los consumidores ecuatorianos tienen acceso a una amplia gama de opciones.